Vestir una radio no es tarea menor. Vestirla no sólo es programarla, es también, cuidar su aspecto físico, el estado de sus espacios, su higiene. Muchas radios suenan bonitas, pero son menos bellas por dentro. Procure un frente bien pintado, ojalá con la parrilla de programación escrita y destaque en el mismo el nombre de la radio. A propósito: ¿hace cuánto no hace cambios físicos y de programación en su emisora?
El vestido tiene que ver con formas que se mezclan con fondos dentro del texto sonoro. Reúnase con el equipo de la radio, con los amigos de la emisora y emprenda una campaña para embellecer el medio de comunicación. Si los oyentes merecen lo mejor, también merecen una radio bien conservada. No lo piense más y para diciembre embellezca su radio. El vestido forma parte de la personalidad del dial. Serie radial disponible. Video conferencia disponible.
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